martes, noviembre 28, 2023

VERSIONES DE UNA VIDA (XCIX)


Aunque la década de los 60 supuso un indudable salto en la Historia de la música y la sociología de la Humanidad, lo cierto es que la inmensa mayoría de las canciones seguían hablando de lo de siempre, o sea del amor y el desamor en el ámbito de la pareja. Por eso, el tema que hoy traigo me sorprendió porque trata de hasta qué punto la juventud supone una ruptura con respecto a sus padres, sin poder negar el hecho de la herencia genética y cultural que nos legan nuestros antepasados.

El título de la canción es “Father´s name is dad”, compuesta en 1968 por los ingleses Fire. En la letra aparecen términos como “edad”, “culpa” o “carrera”, y no deja de resultar chocante que en plena era psicodélica de las drogas, la desinhibición, el desenfreno y el amor libre, estos chicos se preguntasen: “¿Por qué todo debe hacerse para que parezca una loca escapada?”.

¿Podemos evitar parecernos a nuestros padres? ¿Cuánto ha evolucionado realmente la Humanidad a lo largo de toda su Historia? Nuestra cultura es judeo-cristiana, del “ojo por ojo” pretendimos pasar a “poner la otra mejilla”, en los 60 se intentó que reinaran la paz y el amor universales, pero la realidad es que en 2023 sigue habiendo desigualdad, odio, tensiones territoriales, crispación sociopolítica, guerras, violencia de género, terrorismo, padres que maltratan y matan a sus hijos e hijos que agreden y golpean a sus maestros y a sus padres.

En 1986, en plena época dorada de las bandas suecas, los Pushtwangers hicieron una extraordinaria versión del tema. Y en el momento de escribir esta entrada he descubierto otro grupo británico que también publicó una versión, en 1988, The Driscolls.

¡Mucha salud y disfrutadlas!:

1) Fire (London (UK), 1968).

2) The Pushtwangers (Suecia, 1986).

3) The Driscolls (Somerset (UK), 1988).

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viernes, noviembre 24, 2023

VERSIONES DE UNA VIDA (XCVIII)


La visión de la Luna creciente atravesando el firmamento vespertino y reflejándose en la superficie del río, bordeado de cantos rodados en sus orillas, con unas setas de chopo (Agrocybe aegerita) y una esférica lupia (tumor) sobre el tronco de un sauce, me ha hecho pensar en la gran abundancia de formas redondeadas que podemos ver en la Naturaleza.

La Luna no deja de ser un trozo de roca que, por efecto de la gravedad y la rotación, antes de solidificarse del todo, adquirió forma esférica. Los cantos rodados se van redondeando y puliendo su superficie, debido al continuo golpeteo y al roce con otras piedras del fondo del río, al ser arrastradas por la corriente de agua, pero… ¿Por qué la mayoría de los sombreros de las setas y las lupias de los árboles son redondas?

En 1965, Bob Dylan, “el bardo de Duluth”, publicó una de sus canciones más emblemáticas “Like a Rolling Stone”. Sorprendentemente, “sus satánicas majestades” tardaron 30 años en sacar su versión, aunque debo confesar que este gran tema adquiere una dimensión e intensidad especial en la voz de una mujer, tal y como acabade hacer Cat Power (Chan Marshall).

¡Mucha salud y disfrutadlas!

1) Bob Dylan (USA, 1965).

2) The Rolling Stones (London (UK), 1995).

3) Cat Power (Atlanta (Georgia), 2023).

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viernes, noviembre 10, 2023

VERSIONES DE UNA VIDA (XCVII)


Nunca antes había visto esa extraña oruga verdosa (1ª foto tomada por mí, en A Guarda (Pontevedra), el 22/10/2023), estirada para simular una ramita más de Hinojo (Foeniculum vulgare), mostrando una especie de cola armada con seis espinas negras. La busqué dentro de la familia Geometridae, así llamada porque las orugas se mueven como si estuviesen midiendo el terreno sobre el que se desplazan. Pero resulta que no, que se trata de un Noctuidae, y lo que pensaba que era una cola espinosa se trata de la cabeza seguida de las patas torácicas o verdaderas de color negro, pertenecientes a la especie Thysanoplusia orichalcea (mariposa adulta en la 3ª foto (por cortesía de Óscar Ventura (Briones (La Rioja), 07/11/2023); y capullo con la pupa en la 2ª foto por cortesía de María Ángeles Villasenín, A Guarda (Pontevedra), 04/11/2019).

En la película titulada “Hans Christian Andersen” (1952), el famoso actor estadounidense Danny Kaye interpretó el tema “Inchworm” (oruga geómetra o gusano medidor en inglés), que fue recordada años más tarde en el “Muppet Show” (ver primer vídeo); y resultó ser una gran inspiración, una especie de canción fetiche o talismán, para David Bowie, durante su infancia, incluso confesó en una entrevista que “Ashes to Ashes” no habría existido sin “Inchworm”. Lo que no deja de ser curioso, teniendo en cuenta las numerosas metamorfosis que ha atravesado el camaleónico artista británico.

La canción ha sido versionada por muchos más músicos, entre los que destaca Paul McCartney, que la tocó y cantó en 2012.

¡Mucha salud y disfrutadlas!

1) Danny Kaye (Hollywood (California), 1952).

2) David Bowie (London (UK), ¿1980?).

3) Paul McCartney (Liverpool (UK), 2012).

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jueves, noviembre 09, 2023

INSTINTO MUSICAL


Hace pocas semanas, en el programa de RTVE “Qué animal”, hablaban sobre el posible sentido musical de los animales. El naturalista y sonidista Carlos de Hita indicó que los seres humanos y gran parte de los vertebrados compartimos unos mismos gustos y que ese sentido estético universal está más cerca del cerebro reptiliano más primitivo que del cerebro más moderno del cortex o neocortex.

Todos los seres vivos empleamos el sonido para comunicar mensajes, sobre todo dirigidos a nuestros propios semejantes, tales como la delimitación de un territorio, la atracción de una pareja mediante la exhibición de ciertas características (vigor, fuerza, volumen, belleza, habilidad, inventiva, talento y buena calidad de los genes) y no sabemos si algún otro tipo de mensajes más sofisticados o por mero divertimento, en los grupos más inteligentes (primates, cetáceos, córvidos y loros).

Los seres humanos empleamos un lenguaje oral y escrito muy complejo, pero la música, quizás por ese enraizamiento profundo y ancestral, añade un plus de intensidad, espiritualidad y diversión.

En la Edad Media, los juglares empleaban la música para contar historias, porque resulta mucho más ameno y divertido que leer un escrito o lanzar un pregón hablado. En la música popular actual, dependiendo de los diferentes estilos, se hace mayor o menor hincapié en la letra o en la música, y dentro de esta última, puede dársele mayor preponderancia al ritmo y al baile, que a la melodía o la voz.

Personalmente, la voz y cantar nunca ha sido lo mío, por eso en los Rescuers me “parapetaba” detrás del órgano, aunque, en el fondo, a mi lo que de verdad me hubiese gustado es saber tocar una “Rickenbacker” como hacía el bueno de Marty Willson-Piper en The Church, muy aficionados también a la estética medieval.

Resuena en el sombrero: “Reptile”.- The Church (Australia, 1988).

miércoles, noviembre 08, 2023

VERSIONES DE UNA VIDA (XCVI)



Esta tarde, Diego R. J. entrevistó a los Arrrghs!!!, con el gran Juanito Wau a la cabeza, con motivo del 20 aniversario de la formación de una de las bandas de Garage más salvaje, genuino y primitivo de España e, inevitablemente, me hizo recordar cuando estaba en The Rescuers, y en 1987, entré en contacto con la “Movida valenciana” del “Revival sesentero”, por mediación de Carlos Brun, responsable del fanzine “La Marabunta (en la 1ª foto).

Gracias al álbum que Wau y los Arrrghs publicaron en 2005, descubrí al grupo de garage de Orlando (Florida) We the People (1965, con su cantante a la izquierda de la segunda foto), ya que la banda valenciana versiona su tema “My Brother the Man”, con el título de “Niña, que comienza diciendo “Niña, no se hablar inglés…”.

La canción tiene un ritmo machacón y sincopado, pero con un aire aflamencado que le confiere un cierto y buscado exotismo que era muy del gusto de los grupos anglosajones de “Garage psicodélico en los 60. Wau y los Arrrghs, al traducirla al castellano, le dan un toque castizo, kinki y aún más salvaje si cabe, que me ha hecho recordar una figura tan alocada, espontánea y que conectaba el ancestral “pelo de la dehesa” con la modernidad ye-yé, tan típica de la España de finales de los 60, como fue Manuel Benítez “El Cordobés (al derecha en la 2ª foto) .

¡Mucha salud y disfrutadlas!

1) We the People (Orlando (Florida), 1965).

2) Wau y los Arrrghs (Valencia (España), 2005).

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sábado, noviembre 04, 2023

VERSIONES DE UNA VIDA (XCV)


Una de las familias de aves en la que existe una mayor diversidad de especies es la de las Limícolas. A primera vista, podría pensarse que un grupo de pájaros de pico más o menos largo y fino que caminan con patas esbeltas, para alimentarse picoteando entre el limo de las orillas de zonas húmedas, no tendría por qué ser tan diverso, pero es que la forma de los picos, la longitud de las patas y sus preferencias de hábitats más o menos costeros o dulceacuícolas, ofrecen unas posibilidades de distintas combinaciones casi infinitas. Así, de mayor a menor tamaño tenemos: Ostreros, Zarapitos, Agujas, Agujetas, Avefrías, Avocetas, Becadas, Agachadizas, Combatientes, Chorlitos, Chorlitejos, Cigüeñuelas, Archibebes, Andarríos y Correlimos. Aunque me parecen mucho más bonitos los nombres en gallego de estas aves: Gabitas, Patudas, Arceas, Liorteiros, Mazaricos, Biluricos, Becacinas, Píllaras, Pirlos y Pilriños. En la fotografía de arriba, extraída de un vídeo grabado el pasado mes de octubre, en el Estuario del Miño (A Guarda, Pontevedra), por mi querida María Ángeles Villasenín, pueden verse: Aguja colinegra o Mazarico rabinegro (Limosa limosa), en vuelo mostrando el motivo de su nombre; Zarapito trinador o Mazarico chiador (Numenius phaeopus); Zarapito real o Mazarico curli (Numenius arquata) y Archibebe claro o Bilurico pativerde (Tringa nebularia).

La mayoría de estas bellas aves crían en el Norte de Europa y llegan a nuestras costas y campos peninsulares, a partir de ahora, para pasar el invierno o hacer una parada en su viaje hacia tierras africanas aún más cálidas, huyendo del frío.

La canción que hoy traigo tiene como temática unas herramientas pinchudas de diversa longitud, agujas y alfileres, que, en este caso, no se clavan en el limo ni en la arena, sino en el tierno corazón de unos adolescentes, como eran The Searchers, grupo que formó parte de la denominada “British Invasion” que se produjo a mediados de los 60, en Estados Unidos, encabezada por sus ilustres paisanos The Beatles. 24 años más tarde, en 1978, resulta no poco sorprendente que esta tierna balada fuese versionada por unos melenudos pioneros del “Punk” como fueron los neoyorquinos The Ramones.

En fin, dejémonos invadir por bellas aves nórdicas y por grupos extranjeros que nos traen buena música ¡Mucha salud y disfrutadlas!

1) The Searchers (Liverpool (UK), 1964).

2) The Ramones (New York (USA), 1978).

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