Hace unas semanas, en el programa de Radio 3 “Hoy Empieza Todo”, se discutía sobre el término “Hipster” y lo que entiende la gente al escuchar esta palabra, y las conclusiones a las que se llegaron podrían resumirse en estos términos:
Como la palabra “moderno” ha pasado a ser muy “main stream”, hace relativamente poco tiempo que los más vanguardistas y ”enteraos” han recuperado el término “Hipster”, calificativo creado en los años 40, para designar a los jóvenes iniciados en la subcultura afroamericana y el jazz.
"Hipster" deriva de la palabra "hip". En los años 40, los músicos de jazz usaban la palabra "hip" para describir a cualquiera que conociera sobre la emergente subcultura afroamericana, estilo negro wallison, lo cual incluía conocer de jazz. Los miembros de la subcultura fueron llamados "hepcats", un término que luego se transformó en la palabra "hipster". El primer diccionario en listar la palabra hipster fue el pequeño glosario "For Characters Who Don't Dig Jive Talk" (Jive se refiere a la jerga de los músicos de jazz), publicado en 1944 con el álbum "Boogie Woogie In Blue" del pianista Harry Gibson, quien actuó como "Harry el Hipster". La entrada para hipsters los definía como, "personas que gustan del hot jazz".
Actualmente, la palabra “Hipster” se relaciona más con la música independiente o “indie”. Pero, siguiendo con la teoría que propone esta sección, basada en que todo en esta vida es circular y cíclico, de manera que, tarde o temprano, los extremos acaban por encontrarse o tocarse, resulta que ahora lo más moderno es ser “retro”, es decir, llevar las chaquetas que se ponía tu abuelo, gafas con montura de pasta, beber patxarán en tabernas castizas, cuya solera se aprecia en los cuadros de paisajes costumbristas que cuelgan de sus paredes, mientras se juega la consabida partida de cartas o dominó con los amigos, y escuchar música de grupos que nadie conoce, si es posible, incluso antes de que dichos grupos existan o hayan sacado disco alguno.
De esta forma, en otro programa de Radio 3 (“180 Grados”), el otro día la dulce voz de Virginia Díaz describió la música del grupo MGMT (primera foto) como “retrofuturista psicodélica”, calificativo que ha servido para que otro programa de Radio 3, “Disco Grande” (del incombustible Julio Ruiz) hiciese un concurso la semana pasada, en el que el premio eran dos entradas para asistir al concierto que dicho grupo va a dar el próximo 19 de octubre en Dublín (Irlanda).
Pero, vamos a ver,… ¿Cómo se puede ser “retro” y “futurista” a la vez? Pues sí, es la cuadratura del círculo, que se cierra con la estética de esas películas de serie B, futuristas y de ciencia ficción, de los años 50 y 60, que parecen estar muy de moda entre los jóvenes más vanguardistas, snobs, enteraos, “hipsters” o como los queramos llamar… Me pregunto cómo se llamará la siguiente generación de “selectos jóvenes pseudorebeldes y pseudointelectuales”.
Resuena en el sombrero: “Introspection”.- MGMT (Connecticut (USA), 2013), que es la canción que comentó Virginia y que resulta ser una versión de un grupo de hippies americanos de 1968, llamados “Faine Jade” (Long Island (USA), 1968). O sea que el “retrofuturismo” reivindica aquellos tiempos en los que Kraftwerk eran hippies. Pero resulta que Julio Ruiz dice que MGMT son de lo más “main stream”, dentro de la música “indie”. Si a alguien le ha quedado algo claro, por favor que me lo explique, porque yo debo ser muy antiguo… o retro?.. A lo mejor soy un “Hipster” y no me he enterado???