A menudo se habla del uso
medicinal de las
plantas, pero poca gente conoce que también existen
hongos que son utilizados con esta finalidad en todo el mundo, quizás, como suele suceder en este ámbito, los más destacados sean los países asiáticos, sobre todo
China.
En este país son muy apreciados unos hongos ascomicetos parásitos de orugas y crisálidas de lepidópteros como son
Ophiocordyceps sinensis y
Cordyceps militaris.
El primero es parásito de las orugas del género Thitarodes que viven bajo tierra, en el suelo de praderas alpinas de la Meseta Tibetana y en la Cordillera del Himalaya (a una altitud de 3.000 a 5.000 m.) alimentándose de humus y de raíces de diversas plantas (Ranunculus, Cyananthus, Juncus y Veronica). No está claro si es a través de la ingesta de alguna espora o mediante contacto del micelio con los orificios respiratorios, el hongo penetra en el interior de la oruga, la infecta y acaba llenándola por completo de micelio, produciendo su muerte y momificación. Si bien, antes de que esto ocurra, de alguna manera el hongo induce a la oruga a que ésta ascienda por su galería hasta situarse cerca de la superficie del suelo, donde, en primavera, después de que se derritan las nieves, emerge el carpóforo o seta del suelo (ver 1ª foto) que alcanza una longitud de 5 a 15 cm.
Ophiocordyceps sinensis es conocido en el Tibet como “Yarsagumba” (“dbyar rtswa dgun´bu” que significa “gusano de invierno de la hierba de verano”) y es muy apreciado por los países de la zona (Nepal, India, China, Tibet y Buthan) por sus propiedades afrodisíacas y sus efectos contra la fatiga y el cáncer, al parecer debido a su contenido en una sustancia llamada “cordycepina”.
Algunas atletas chinas que consiguieron medallas en las últimas Olimpiadas de Londres y que dieron negativo en los análisis antidopaje, han confesado que consumieron “Yarsagumba” y “Sangre de tortuga”.
Cordyceps militaris es un hongo parecido mucho más extendido que el anterior, en la
Península Ibérica es conocido por su beneficiosa labor de parasitar y destruir las crisálidas de la
Procesionaria del pino (
Thaumetopoea pityocampa). Este hongo infecta las crisálidas y emerge del suelo, frecuentemente musgoso (2ª foto), cuando las condiciones meteorológicas son apropiadas. En
China se vende a unos 20 $/Kg., donde se usa para comer y como medicina utilizada para fortalecer el tuétano de los huesos, prevenir el cáncer, calmar y reducir las inflamaciones, detener hemorragias y reducir la flema, por lo que se utiliza en el tratamiento contra la nefritis, la hepatitis, el asma y la neurastenia.
Este hongo está siendo cultivado en algunos países como la República Checa y China, utilizando sustratos enriquecidos con polvo de crisálidas de gusanos de seda (Bombyx mori), pero incluso se está consiguiendo cultivar sin problemas sobre cereales (trigo y arroz) con cierto grado de cocción. Se ha analizado el contenido en cordycepina de estos Cordyceps militaris cultivados y se ha comprobado que es superior al de los ejemplares silvestres de Ophiocordyceps sinensis. Sin embargo, las propiedades medicinales de ambos hongos son diferentes, por lo que es presumible que la cordycepina no sea la única sustancia responsable de dichas propiedades.
Otros hongos de uso medicinal en
Asia desde hace más de 4.000 años, han llegado antes a conocimiento de la civilización occidental, tal y como sucede con el hongo aphyllophoral
Ganoderma lucidum (3ª foto), denominado vulgarmente “
Seta pipa”, en
España, o “
Ling-Zhi”, en
China, que vive de manera principalmente saprófita, excepcionalmente parásito de árboles vivos, sobre la madera de caducifolios, en la que produce una
podredumbre blanca.
Esta seta se vendía hasta hace poco en herboristerías mezclada con gingseng para reforzar el sistema inmunológico, principalmente para prevenir gripes y catarros.
Otro hongo parecido, el conocido “yesquero” (Fomes fomentarius, 4ª foto), además del uso que indica su nombre vulgar, para prender y mantener el fuego (en algunos pueblos vascos era tradicional mantener permanentemente encendido durante todo el año el fuego procedente del cirio pascual, en los hogares, mediante el uso de este hongo que recibía el nombre de “supizteko ardagaia" (yesquero para encender)), seco y molido se usaba como desinfectante y cicatrizante. Decir que “Ötzi”, la momia natural más antigua de Europa (Edad de Cobre, 3.300 a.C.), encontrada hace años (1991) en un glacial suizo, próximo a la frontera con Austria, llevaba encima este hongo en sus dos formatos (fuego y “algo más”) en un recipiente construido con corteza de abedul, resistente a la humedad y buen mantenedor del yesquero que permitía transportar fuego encendido en las condiciones extremas en las que se encontraba, a tenor de las ropas y otras cosas que llevaba.
La “amanitina”, una sustancia extraída de especies venenosas mortales como Amanita phalloides y A. verna, está siendo investigada para su posible uso en el tratamiento de tumores cancerígenos, ya que esta sustancia inhibe la síntesis de ARN y por tanto induce la apoptosis o muerte celular programada.
Otros hongos con uso medicinal son los siguientes:
-
Alucinógenos:
Claviceps purpurea,
Psilocybe sp.,
Panaeolus sp.,
Stropharia sp., y con poca actividad,
Amanita muscaria.
- Antialcohólicos: Coprinus atramentarius.
- Antibióticos: Agrocybe dura, Lactarius deliciosus, Lactarius sanguifluus, Lactarius piperatus, Marasmius oreades, Clitocybe nebularis, Agaricus blazei.
- Anticancerígenos: Lentinus edodes, Ganoderma lucidum, Grifola frondosa, Cordyceps sinensis, Trametes versicolor, Schizophyllum commune, Flammulina velutipes, Langermannia gigantea, Polyporus umbellatus, Pleurotus ostreatus, Auricularia auricula judae, Calvatia cyathiformis y Agaricus blazei.
Los efectos anticancerígenos se deben sobre todo a la acción de Polisacáridos complejos del tipo Beta-D-Glucanos, siendo los más conocidos: Lentinan y AC2P (Lentinus edodes), Ganoderan (Ganoderma lucidum), Grifolan (Grifola frondosa), CSF30 (Cordyceps sinensis), PSK ó KRESTIN (Trametes versicolor), Schizophyllan ó SPG (Schizophyllum commune).
-
Antiinflamatorios:
Ganoderma lucidum, Lycoperdaceae.
- Antimutagénicos: Agaricus blazei.
- Antisudoríficos: Laricifomes officinalis.
- Antitrombóticos: Ganoderma lucidum.
- Antivíricos: Ganoderma lucidum, Grifola frondosa, Lentinus edodes, Trametes versicolor.
- Con acciones sobre el sistema inmunitario: Cordyceps sinensis, Flammulina velutipes, Lentinus edodes, Trametes versicolor, Tricholoma populinum.
- Hemostáticos: Fomes fomentarius, Lycoperdon sp. y Calvatia sp.
- Hipocolesterolémicos: Pleurotus ostreatus, Lentinus edodes.
- Hipoglucemiantes: Calocybe gambosa, Cantharellus cibarius, Craterellus cornucopioides, Hypholoma capnoides, Cordyceps sinensis, Ganoderma lucidum, Grifola frondosa.
- Hipolipidémicos: Cordyceps sinensis, Grifola frondosa.
- Laxopurgantes: Ramaria sp., Clavaria sp., Russula sp., Boletus satanas, Agaricus xanthoderma, etc.
- Potenciadores sexuales: Cordyceps sinensis, Lentinus edodes.
- Protectores hepáticos: Ganoderma lucidum.
- Reguladores de la presión sanguínea: Lentinus edodes.
- Sedantes: Ganoderma lucidum.
- Vasoconstrictores: Claviceps purpurea.
- Vitaminas: Claviceps purpurea, Pisolithus tinctorius, Cantharellus cibarius, Cantharellus lutescens, Agaricus bisporus, Agaricus campestris.
A la vista de ésta situación se puede decir que las especies de setas de interés terapéutico, en el momento actual, rondan el centenar, destacando por sus propiedades, difusión y uso las siguientes:
Lentinus edodes:
Antitumoral e inhibidor de metástasis: Lentinan y AC2P. Regulador de la presión sanguínea. Inmunoactivo y antivírico: Antivirus de la Influenza. Producción de interferón. Descenso del colesterol: Eritadenina. Potencia
la inmunidad y prolonga la supervivencia de los pacientes.
Ganoderma lucidum:
Sedante suave. Antidiabetes. Antitumoral: Ganoderam. Protector hepático. Antiinflamatorio. Inhibidor del virus HIV.
Trametes versicolor:
Antitumoral. Acción frente a inmunodeficiencia por virus tipo 1.
Grifola frondosa:
Regulador de la presión sanguínea. Anti HIV. Antiobesidad. Antidiabético. Antitumoral.
Cordyceps sinensis:
Inhibidor de células tumorales. Hipoglucemiante. Inmunidad celular. Efectos sobre la leucemia humana. Efectos sobre los linfocitos T en fallo renal crónico. Tratamiento de la hipofunción sexual. Tratamiento de la hiperlipidemia.
Lycoperdaceae: Lycoperdon sp., Calvatia sp., Langermannia sp..:
Hemostático. Antiinflamatorio. Antitumoral.
Flammulina velutipes:
Proteína inmunomoduladora. Antitumoral.
Pleurotus ostreatus:
Descenso del colesterol. Antitumoral.
Schizophyllum commune:
Antitumoral frente al cáncer de pulmón
Muchas gracias a Martin, Iván, Antton, Guillermo, Grupo micológico “Verpa” (Logroño) y Asociación Micológica Vegadense (Vegadeo, Asturias), sin cuya colaboración no hubiera sido posible redactar esta entrada.