El año 2009, el Ayuntamiento de Camprovín (La Rioja) organizó un concurso para elegir el escudo de la localidad (1ª foto). El símbolo central resultó ser una abubilla, con la que se recuerda un viejo litigio con Arenzana de Abajo sobre unos pastos, en un terreno lindero llamado “Valdecardiel”. Cuenta la historia que discutiendo sobre esa tierra apareció una Abubilla y decidieron que el pasto sería para quien la cogiera. Lo hicieron los de Arenzana, que comenzaron a llamar 'abubillos' a los de Camprovín. Como respuesta, a los de Arenzana se les puso 'zancarrones', porque habían corrido más.
En otra versión de este cuento o leyenda, se afirma que los habitantes de Camprovín confundieron la Abubilla (pájaro, dicen, que nunca antes habían visto en el pueblo!!!???) con una aparición de la Virgen (!!!???). Y fueron tras ella, llevando una andas con una sábana para que se posara en ella:
“Abubillita, abubillita,
pósate en esta sabanita”.
Pero la Abubilla, ave algo temerosa del hombre, cada vez que se acercaban volaba unos metros y se alejaba del pueblo. Andaban por allí cerca unos pastores de Arenzana de Abajo quienes, en cuanto vieron la escena, sintieron curiosidad y, a grandes zancadas, se acercaron a la abubilla y la apresaron. Allí mismo se formó el pleito entre los dos pueblos:
– "Devolvednos a la Virgen!" –Decían los de Camprovín–.
– "No, que se ha querido venir con nosotros" –Respondían los de Arenzana–.
– "¡Pero nosotros la hemos visto nosotros antes!"
– "Pues vamos a ver cómo nos arreglamos: Nosotros os damos a la Virgen y a cambio nos quedamos con este valle".
Y así fue cómo Valdecardiel, un término más próximo a Camprovín que a Arenzana, se quedó en la jurisdicción de este último pueblo. Desde entonces a los de Camprovín se les conoce con el apodo de “Bubillos” y a los de Arenzana de Abajo como “Zancarrones”, por las grandes zancadas que dieron para agarrar a la Abubilla.
En el año 2017, se organizó en Camprovín un campeonato de pinturas murales para adornar el pueblo y resultó ganadora el que veis en la 2ª foto, también con las abubillas como protagonistas.
Por eso, no es de extrañar, que este ave figure también en el emblema del “Grupo Ornitológico de La Rioja” (3ª ilustración).
Lo cierto es que la Abubilla (Upupa epops) es una bella ave que mide entre 25 y 29 cm de longitud, tiene una envergadura de 44-48 cm. En vuelo, se asemeja a una gran mariposa blanquinegra (4ª foto). En la 5ª foto: Plumas secundarias de 10,5 y 9,5 cm. de longitud.
Es un ave migradora, que viene a la Península Ibérica en primavera para anidar, pasando el invierno en el África subsahariana.
Debido a su monótono y repetitivo canto, que recuerdo algo al del Cuco, en algunas zonas de Castilla se la conoce como “Cuclillo”.
Es un ave beneficiosa, ya que devora gran cantidad de insectos, siendo incluso capaz de extraer las crisálidas de la “Procesionaria del pino”, clavando su largo y curvado pico en el suelo donde se entierran.
Resuena en el sombrero: Canto de la Abubilla.