En los setos, sotos, bordes de balsas, acequias, arroyos, bordes y claros de bosques de La Rioja, zona Norte de la Península Ibérica, Francia, Inglaterra y otras partes de Europa, podemos encontrar con relativa frecuencia algunos arbustos o pequeños arbolillos que portan pequeñas ciruelas, más o menos comestibles según la especie, siendo discutible si se trata de especies verdaderamente autóctonas o de frutales asilvestrados.
El más común y realmente autóctono, sin ningún género de dudas, es el Endrino, Sloe o Black Thorn (Prunus spinosa), con cuyos pequeños, ásperos y ácidos frutos, las endrinas (5ª foto), se elabora el famosos licor conocido como patxarán, mediante su maceración durante al menos 3 meses en anís y/o aguardiente. Se trata de un arbusto muy espinoso que florece poco antes o justo en el momento en el que comienzan a brotar las hojas.
El Ciruelo silvestre, Bullace o Damson Plum (Prunus insititia o Prunus domestica ssp. insititia) no está del todo claro si se trata de una especie realmente autóctona o se trata de un antiguo cultivar de ciruelo que se ha asilvestrado, hay quienes piensan que se obtuvo por hibridación entre el Prunus spinosa y el Prunus cerasifera, mientras que otros opinan que se obtuvo exclusivamente mediante selección humana, a partir del endrino (P. spinosa). El nombre de “Damson” procede del término “damascenum” o “Ciruela de Damasco”, ya que hay una teoría que sostiene que este ciruelo se cultivó por primera vez en los alrededores de esta antigua ciudad de Siria, en Oriente Medio, y que fue traída a Europa por los Romanos.
Existen distintas variedades, el más “autóctono” o “silvestre” parece ser el “Wild Damson Plum”, un arbolillo algo espinoso, con pequeñas ciruelas de color azul oscuro pruinoso (ver primera foto), son algo más grandes que las endrinas pero más pequeñas que las “Bullace” y las Ciruelas, tienen una forma algo alargada (similar a las aceitunas), su sabor es algo áspero y astringente, aunque no tanto como las endrinas. La semilla o hueso está muy adherida a la pulpa del fruto, de la que es difícilmente separable y tampoco se secan bien como las ciruelas pasas. En Inglaterra son muy apreciadas para elaborar con ellas un licor, macerándolas en vodka con azúcar. Florece con las hojas ya algo crecidas y los frutos maduran en octubre-noviembre.
Hay varias variedades de Bullace como la “Black Bullace”, similar a la “Wild Damson” pero con frutos algo mayores y totalmente esféricos (ver primera foto y segunda lámina). La White o Golden Bullace, denominada también “Mirabelle” de color amarillo dorado con la carne verdosa y de sabor algo más dulce (ver 4ª foto), maduran en septiembre-octubre y las ramas no suelen tener espinas. Otras variedades de Bullace que se cultivan en Inglaterra son la "Sheperd´s Bullace", de color verde-amarillento con moteado rojizo en el lado más expuesto al sol, y la "Langley Bullace", la más dulce de todas.
Por último estarían los Ciruelos cultivados asilvestrados (Prunus domestica) que tienen ramas sin espinas, hojas y frutos más grandes, ciruelas más dulces y colores y formas muy variados, suelen madurar en septiembre, aunque, cuando son de color azul oscuro pruinoso, son difícilmente diferenciables del “Black Bullace” supuesta o probablemente autóctono.
En fin, sea como fuere, merece la pena conservar estos bellos arbustos y arbolillos con los que se elaboran licores, mermeladas, bizcochos y magdalenas, que dan belleza, riqueza y diversidad a nuestros cada vez más escasos setos y sotos.
Primera foto: De izquierda a derecha: Wild Damson; Bullace; Ciruela comestible.
Autor de la segunda lámina: Charles Darwin (1868): Semillas o huesos de ciruelas: 1) Bullace Plum; 2) Shropshire Damson; 3) Blue Gage; 4) Orleans; 5) Elvas; 6) Denyer´s Victoria; 7) Diamond.
Tercera lámina: De izquierda a derecha: Prunus spinosa (Black Thorn); Prunus insititia (Bullace); Prunus domestica (Wild Plum).
3 comentarios:
Las fotos de las ciruelas salvajes me han salvado de una soberana indigestión o algo peor... Había cogido en el campo unos curiosos frutos azulados con los que hice una mermelada creyendo que eran arándanos. Las recetas decían simplemente que cuando estuvieran cocidos se majaran en el pasapurés o más fácil,la Termomix, pero no acababa de entender este final a la vista de las soberbias pepitas que me quedaron nadando en el mejunje. En fin, ahora ni mermelada ni pacharán, aunque al final no hay día que no traiga provecho, mira.
Las endrinas tampoco es que sean tóxicas, son algo amargas. Las ciruelas silvestres en cambio son más dulces y se pueden comer y hacer con ellas mermeladas, quizás precisen una cantidad algo mayor de azúcar, pero son perfectamente comestibles.
Los arándanos salen en unas matas mucho más bajas que los endrinos y no tienen espinas.
Encantado de saludarla Doña Endrina.
Yo tenía un ciruelo de ciruelas de Damasco y cuando éste murió allí mismo brotó otro ciruelo pero silvestre con ciruelitas como cerezas rojas oscuras y muy dulces.
Publicar un comentario