miércoles, febrero 25, 2009

Surf en el Manzanares, como que no




Parece que fue ayer cuando se formaron, pero lo cierto es que "Los Coronas" van a cumplir 20 años de existencia. Y yo diría que están más en forma que nunca, ya que acaban de editar su último LP: "El Baile Final de los Locos y los Cuerdos", y claro, con ese título y como uno de los fundadores del grupo, Fernando Pardo, es amiguete, pues había que comentarlo como se merece. Pero resulta que buscando en internet he encontrado una crónica de Carlos Marco en "El País" del pasado 13 de febrero, cuando presentaron en la Sala "El Sol" de Madrid el mencionado álbum, que me ha parecido insuperable, por lo que, con su permiso, paso a transcribirlo tal cual:

"El último seguidor de Los Coronas tiene un nombre ilustre: Steve Van Zandt, guitarrista de Bruce Springsteen los últimos 30 años y la encarnación de Silvio en la excelente serie televisiva "Los Soprano". Esta extraordinaria historia arranca con el timbrazo de una llamada de teléfono que se escucha en el barrio de Malasaña, zona de influencia de Los Coronas. "Hola, soy el mánager de Steve Van Zandt y me gustaría invitaros a la zona VIP del concierto de esta noche en el Santiago Bernabéu. Steve es fan vuestro y quiere conoceros".

¿Cómoooo? La mandíbula de los cuatro componentes de Los Coronas se desencajó e hizo crack contra el suelo. Cuenta la aventura Fernando Pardo, 44 años, melenas al viento, fundador y guitarrista de Los Coronas: "Llegamos al estadio y nos hicieron pasar a un bar privado. Allí estábamos nosotros, rodeados de un puñado de chicas bronceadas que no sabíamos muy bien a qué se dedicaban. Entonces aparecen dos cochazos. De uno se baja Bruce Springsteen y del otro Steve, que se dirige hacia nosotros acompañado de sus dos mánagers, uno blanco y el otro negro. Y nos dice: '¿Sois Los Corounas? Me encanta la música que hacéis y quiero editar vuestros discos en mi sello".

Hoy, seis meses después de aquel mágico encuentro, el grupo de Malasaña está intercambiando los últimos emails con Steve para concretar el contrato y que el veterano músico publique en Estados Unidos el último álbum de Los Coronas, El baile final de los locos y los cuerdos, ya editado en España y que presentan hoy en El Sol.

El buen olfato de la mano derecha de Bruce y de Tony Soprano es evidente: con mucha seguridad, Los Coronas es una de las mejores bandas de Surf rock de Europa. Pero, ¿qué es el surf? Los Coronas, que cumplen ya 18 años de carrera, informan: "Es una derivación de la música instrumental que surge a finales de los cincuenta y principios de los sesenta, que se puso de moda entre los jóvenes californianos que practicaban el deporte del surf".

Vale, esa es la definición wikipédica, pero ahí va una más popular: rock and roll primitivo y salvaje que transforma en una fiesta toga los locales donde se interpreta. "Es un baile más bien mongol, concede el cuarteto con sorna, "de estilo libre, contagioso, de dejarse llevar". Ojo, estamos hablando de canciones sólo instrumentales, alejadas de cualquier canal comercial. Más aún: por debajo del underground. Serie B (más bien z) musical.

Tres de los cuatro Coronas (el batería, Robbie Lozano, a lo suyo, se ha confundido de hora y no ha llegado a la cita) caminaban ayer por Malasaña. Conocen bien el barrio. Fernando Pardo, que compatibiliza el grupo con los infatigables Sex Museum, vive desde hace tiempo cerca de la calle Pez; y David Krahe, 38 años, el otro guitarrista, es uno de los dueños del legendario club La Vía Láctea. Y sí, es familiar del cantautor Javier Krahe: "Mi tío Javier viene de vez en cuando por La Vía, casi siempre cuando ha perdido alguna de sus partidas de ajedrez. ¿Qué si le cobro las copas? Eso ni se plantea. Él viene aquí y ya hay una copa en la barra esperándole". Javi Vacas, 37 años, el bajista, también se ha pasado muchas noches acodado en el local.

Es mediodía y La Vía ofrece una imagen inédita: totalmente vacía. Todavía no ha subido la verja. En sus pobladas paredes, carteles míticos, como ese concierto que ofrecieron los Ramones, con Nacha Pop de teloneros. Entrada: 350 pesetas.

David heredó el bar de su tío, Marcos López, ya fallecido. "Nos hemos formado musicalmente en La Vía. Todos hemos pinchado aquí canciones de nuestros ídolos, como Dick Dale
(el de la banda sonora de Tarantino, Pulp fiction), The Ventures o Link Wray", comentan.
La conversación se escora hacia terrenos surrealistas. ¿Sus temas de conversación en la furgoneta?: el dopaje en el deporte y la metanfetamina en el desarrollo de la música del siglo XX. ¿Su condición laboral?: "Hemos pasado de vagos y maleantes a rejoneadores y banderilleros, entre otras cosas porque ahora somos autónomos y cotizamos".

La peculiaridad de Los Coronas radica en el sonido, en el que mezclan las melodías de las bandas sonoras del spaghetti western, influencias mejicanas, sonidos de la frontera. "Hemos incorporado una trompeta", explican, "que la toca un tipo ucraniano, Evgeni Riecmkalov. Y nos ha salido una música muy de la España de la cabra, tremendamente cañí". Innovando.

Para el concierto de esta noche lo único que les inquieta es que sus retoños no podrán entrar. Cuentan seis entre los tres, dos por músico. Por lo demás, felicidad absoluta, como la que transmite su música surf, deporte que, por cierto, no practican. Y tienen una buena excusa: "Es que eso de hacer surf en el Manzanares, como que no".

Pues sí señores, su último LP "El Baile Final..." ha sido publicado por el sello "Bittersweet Records", grabado por Kaki Arkarazo en los "Garate Studios" de Andoain, bajo la producción del propio Fernando Pardo. Y se han ido a mezclarlo nada menos que a Tucson (Arizona), en los "Wavelab Studios", a cargo de Craig Schummacker, productor de bandas como Calexico, Neko Case, Giant Sand o The Sadies. Y la masterización ha sido realizada por J.J. Golden (Calexico, Primus, Sonic Youth) en Ventura (California).

En el disco, Fernando Pardo, número uno del rock de serie B de este país, le dedica un tema al ex-sillón de la letra "B" de la Real Academia de la Lengua Española, y otro número uno de la sinceridad, la actitud rockera y la falta de pelos en la lengua, su tocayo Fernando Fernán Gómez (en la segunda foto, quien nos abandonó el 21 de noviembre de 2007):

En la primera foto salen Fernando Pardo y David Krahe haciendo su clásica virguería acrobática de tocar el uno en el mástil de la guitarra del otro, de espaldas ¡No lo intentéis hacer en vuestras casas amigos! ¡Enhorabuena muchachos!

Resuena en el sombrero: ¡A la mierda!.- Los Coronas (Madrid, 2009).

10 comentarios:

desconvencida dijo...

¡Qué grandes son! Estuve hace poco viéndoles (una vez más) en Andoáin, vaya directo!

frikosal dijo...

No está nada mal esa guitarra !!

Mad Hatter dijo...

Son francamente buenos, unos auténticos "monstruos" de la guitarra eléctrica. Y ahora que han metido a un trompeta ruso, deben ser ya la repanocha. La pena es que no van a pasar por Logroño ¡Aunque sí por Tarragona! El 27 de marzo, si no recuerdo mal.

The Incredible E.G.O´Riley dijo...

Excelente banda que podría mirar de igual a igual a cualquier artista. Estos tios son muy grandes, se comen el escenario.

Felicidades por la entrada, que grande!

Saludos y dale recuerdos al amigo Fernando de un fan incondicional.

WODEHOUSE dijo...

Pues ya hace tiempo Luis resina (amigo de Miguel) que trabaja en la calle Velarde en la famosa tienda de instrumentos musicales (total percusión creo que se llama) y componente de los Downtown Aligators me venía diciendo que estos Coronas son de los más aclamados fuera de nuestreas fronteras. Siempre toca algún tema de ellos en su repertorio.

Muy interesante el post, ni he pestañeado oiga...

Mad Hatter dijo...

Pues, sí, sí que parece que gustan estos muchachos, cosa difícil, tratándose de música instrumental.
Gracias "Cavaliere" y "Wode".

Paco Becerro dijo...

Buenos guitarristas, suena muy bien.

Y me gusta la cara de FFG, en esa foto, chulesca.

Con un par.

Mad Hatter dijo...

Muy bien, "Futuro inventor del surf sobre pabellón auditivo".
Me apuesto algo a que la "rubia", está diciendo: "Pero bueno, vale ya de tanto peloteo, buen rollito baboso y palmadita en la espalda ¡A la mierda!".
Ja, ja. Besos para los dos!

Anónimo dijo...

que buenisimos son!!!!!yo conocia mucho mas a sex museum,pero a ellos no los habia visto nunca y alucine,que grandes!!!como tocan,como te lo pasas cuando los ves,que divertidos,geniales!!!!no tengo palabras,espero verlos pronto otra vez,hay donde me pille mas cerca.

Mad Hatter dijo...

Muy bien "Hada", bienvenida y que los disfrutes, son de lo mejorcito que tenemos en nuestro país.
Saludos.