Fin de mes, en la nevera sólo queda una cerveza, una loncha de jamón serrano, medio cartón de leche semidesnatada y un bote de nata líquida a punto de caducar.
Abro el mueble bar en busca de algo en lo que poder ahogar mis penas, pero sólo encuentro un culín de cognac dentro de una solitaria botella de Carlos III.
Desesperado, decido aprovechar las últimas luces de la tarde, cuando el sol está apunto de ocultarse tras los Moncalvillos, para despejarme dando un paseo por el bosque cercano y tomar unas bocanadas del húmedo y fresco aire otoñal.
En la penumbra del pinar, a duras penas acierto a vislumbrar, asomando entre las acículas que cubren el suelo, un solitario y grácil ejemplar de "Tassa de conill rogenca" (Clitocybe gibba), un poco más allá descubro un "Pie azul" (Lepista nuda) de buen tamaño, a su lado hay un pequeño corro de Níscalos (Lactarius deliciosus), con su inconfundible color salmón, zonado en círculos concéntricos, y, por último, recojo un lustroso ejemplar de Pinatell (Suillus luteus), con su característico sombrero parduzco y viscoso.
De regreso a casa, paso junto a un joven Castaño con su follaje otoñal de un luminoso color ambar dorado, bajo el que no encuentro ninguna seta, pero sí un par de erizos, de los que extraigo un puñado de preciosas castañas, con la ayuda de mis botas, para no pincharme.
El paseo me ha abierto el apetito, y como es bien sabido que el hambre agudiza el ingenio y atrae la inspiración, se me ocurrió preparar la cena siguiente:
Se pelan tres castañas y se trocean con los dedos. Se echan en una sartén con un dedo de leche y se pone al fuego, añadiendo una pizca de sal y un pellizco de azúcar. Ahí se dejan cocer unos cinco minutos, hasta que se reduce gran parte de la leche, entonces se añade el culín de cognac y se remueve.
Mientras se dejan cocer las castañas otros cinco minutos, se limpian y cortan las setas. Al Pinatell hay que quitarle la piel viscosa de la parte de arriba del sombrero y los esponjosos poros amarillos que tiene por debajo.
Con unas tijeras, se corta la loncha de jamón serrano en trocitos.
Se pone una cucharada de nata en la sartén con las castañas, se remueve y se van añadiendo las setas por orden de mayor a menor dureza y consistencia: Primero se echan los Níscalos, al cabo de unos minutos el Pie azul, después el Clitocybe y por último se echa el blando Pinatell.
Se añade otro poco de sal, se remueve, y cuando la salsa adquiere una consistencia cremosa, se echan los trocitos de jamón. Se vuelve a remover un poco, se apaga el fuego y se sirve enseguida en un plato.
El resultado es sorprendente, la nata ha absorbido toda la diversidad de aromas que se entrelazan a la perfección, resultando una salsa cremosa que contrasta con la textura quebradiza y tierna de las castañas, la untuosidad del jamón y con el tacto fino y delicado de las setas.
Las acompaño con la cerveza para beber y con un trozo de pan descongelado. La cena se ha salvado con un notable alto, todo un manjar de lo más económico, ya que, además, casi no hace falta lavar los platos, porque os aseguro que no quedó ni una gota de salsa.
Todo ello, gracias a la generosidad del bosque en otoño.
¡Salud!
20 comentarios:
JA,ja,ja...no ha y como ser "apañao"!!
estas comiditas tan sencillas y naturales son las mejores...¡Que se quiten rebozados y pamplinas varias!!!
besote!
Hola Mad. Me alegro de conocerte, y de compartir tu sentido del humor. Eres un "multiplicador de recursos", un invento que aún tiene en ciernes uno de mis personajes favoritos. En cuanto lo tenga cocinado, te avisaré para que lo cates.
El bardo de Minnessota es el mejor, y lo demustra en su último disco, el 8º de la colección "The Bootleg Series". Blues, country, armónica... y buenas guitarras. No se puede pedir más. Si no lo has escuchado, te lo recomiendo.
Te invito al blog fotográfico de un hermano mío. Espero que te guste, aunque casi todas las fotos son de Cantabria. Pero buenas fotos.
http://sinooshubieramirado.blogspot.com
Salud y amor a raudales.
Un abrazo,
C.
¿Por qué siempre nos sobra un loncha huérfana y un tetrabik de nata a medio usar?
Además eres apañao con la cocina, con la economía doméstica y con la limpieza. Ay! qué joyita se llevan algunas.
Besos otoñales.
No puedo creermelo , en serio, lo q hace el ingenio, lo de las castañas me ha llegado
Y todo con un paseo
muakkkkkkkkkkkkk
Hombre, así las crisis son otra cosa. Yo no entiendo ni una palabra de setas, que vergüenza y que pena.
NANCI: Hay una seta muy común, el "Apagador","Apagallump" o "Galamperna" (Macrolepiota procera), que comí la semana pasada, que como mejor está, cuando sus grandes sombreros están abiertos, es hacer con cada dos de ellos un sandwich con una loncha de queso y otra de jamón en medio y rebozarlas, como si fuese un "San Jacobo".
SR. PANDERETA (es que así es más corto, no se ofenda): Encantado de recibirle en este blog. Eso de "multiplicador de recursos" me ha encantado, me lo apunto y estoy deseando leer lo que escribe usted sobre ello.
LULA: Bueno, tampoco te creas que soy muy cocinilla, las setas es que me inspiran mucho. Supongo que te has fijado que es "Nata Líquida" (P.D.: Que conste que la cadena no es cosa mía).
BOLERO: ¡Toma castaña! Me encanta tu imagen identificativa, aunque también me asusta un poco.
FRIKO: ¿Cómo es posible que un catalán y encima fotógrafo sepa tan poco de els fantastiques bolets?
Es una más de mis contradicciones :)
No te apures "Friko", no se puede ser perfecto. Además, de setas (de hongos en general) no hay nadie que sepa mucho, es un mundo muy complejo del que realmente sabemos muy poco.
Sólo quería añadir un apunte culinario más, quizás es una manía mía, pero, aunque resulte poco "mediterráneo" decirlo, tengo supercomprobado que el aceite (incluso el de oliva virgen extra) no les va bien a la mayoría de las setas, porque la absorven demasiado y sus delicados aromas y sus más o menos porosas y esponjosas texturas se preservan mucho mejor en la suave "Nata Líquida".
Oye, pero esto es magia. Qué apañado te veo. Además es creativo y elegante este manjar. Me hubiese gustado ver la foto del resultado final, para hacerme la idea...
Tienes suerte de vivir donde vives, aquí no veo setas.
Pues estuve a punto de hacerle una foto al plato, como he hecho otras veces, pero lo cierto es que no quedaba muy vistoso, una especie de revuelto con una salsa de color crema.
Pues he de decir que, incluso en los parques y descampados de Madrid, salen setas comestibles, si bien no sé hasta qué punto es recomendable su consumo, debido a los metales pesados que pueden acumular, procedentes de la polución. Pero, hace años, en Madrid, cogí y me comí algunos ejemplares de: Senderuela (Marasmius oreades), unas pequeñas setas de color crema que salen en los céspedes formando "corros de brujas"; Seta de chopo (Agrocybe cylindrica), ya comentada en la anterior entrada; Seta de cardo (Pleurotus eryngii), muy parecida a las setas que se compran en bandejas en el super, pero mucho más sabrosas; y otra más rara que también sale en la madera en descomposición, la Volvariella volvacea.
Pero ahora, con esto de que la crisis aprieta, espero que no me salgáis en tropel todos los madrileños y madrileñas a zamparos lo primero que encontréis en el cacho de césped de la esquina. En cualquier caso ¡Cuidado con las cacas de perro!
Siempre puedes llamar a Telepizza, conste que yo ni tengo su número creo...vamos siempre tengo una buena despensa...uy castañas, me encantan asaditas o cocidas con anis eso no se si es una receta castellana o del norte de por ahí!...pero estan muy ricas así!
"Atikus" ¿Qué pasa tío? ¿Que como nunca les llamas, para compensar les haces publicidad gratis? (Es broma campeón).
Efectivamente, lo de las castañas se me ocurrió por las castañas cocidas con anís, y también por el "Marrón glacé". Lo cierto es que, con la nata, lapizca de azúcar y el brandy, quedan como una especie de "Marrón glacé" pero más jugoso.
Hablando de mis "manías" culinarias, que a veces os tomáis a broma, lo de mezclar productos de una procedencia similar o armoniosa, no es ninguna tontería. Por ejemplo, este plato está hecho con productos del bosque como son las setas, las castañas, la nata y la leche (para recoger alguna de las setas tuve que esquivar alguna que otra boñiga de vaca). Incluso el brandy está criado en barricas de roble. El único toque "exótico" que me he permitido ha sido el azúcar, aunque quizás tampoco estarían mal con un chorrito de miel en su lugar, porque a nadie le amarga un dulce.
Besos muy dulces para todos, por enriquecer aún más este plato con vuestros comentarios.
A sus pies...
Fascinado me dejas...
Tengo que probarlo...
Pues ahora en serio, la semana pasada ví una bastante grande en el césped raquítico que bordea la parroquia de mi barrio, protegido con una alambrada; era blanca con un gran sombrero. Yo no entiendo de setas, pero al volver ya no estaba, alguien se la llevó, a pesar de la protección.
"FutBlo": Su halago es un auténtico honor inmerecido, para este aprendiz a cocinilla aficionado. Se lo agradezco de veras, maestro. Pruébalo y si descubres alguna mejora me la comentas. Gracias y un abrazo.
"Wode": Posiblemente se trataba de un "apagador" de la especie Macrolepiota rhacodes, buen comestible también.
Decir que ayer me hice otra cenita económica a base de una ensalada de Cardo mariano (Silybum marianum), champiñones silvestres (Agaricus campestris), Pie azul (Lepista nuda) y unos tomatitos cherry, ligeramente escaldados en agua hirviendo, cortados en rodajas y aliñados con sal, vingre y aceite.
El Cardo mariano, es una hierba silvestre muy común, sus hojas son pinchudas y tienen un bonito jaspeado blanco (según la leyenda debido al derramamiento de unas gotas de leche provenientes del pecho de la Virgen María cuando estaba amamantando al Niño Jesús). Es una verdura excelente, una vez que se le cortan los pinchos, y tiene efectos protectores del hígado.
Eso mismo pensé yo: Esto debe ser un Macrolepiota racorder. Veo que no andaba desencaminada.
Anda mocetón, que sabes más que yo que sé...eres la repanocha!
Si es que note pillo en nigún renuncio...y mira que te pongo trabas!. qué pesada.
Muy bien lo del cardo que además protege el hígado, vas a estar tú más sano que una manzana!
Lo tomates cherris de mdrid son como canicas duras que no saben a nada y valen un fortunín.
¿No me digas que no te llega ni para tomates cherry "Wood"? ¡Jopé con la crisis! Bueno, sólo eran para poner una nota de color ¡Otra vez que se me pasó hacer foto!
Un abrazo setera de ciudad.
Nen!!!
yo me las compro congelás, no es lo mismo no?
un besito
Las setas... y tu vino de la tierra... ¿eso son los dioses????
muackkksssssssssss
Maite, te advierto que a estas les faltaba poco para estar congeladas ¡Porque hace un frío ya!
Bueno Carmen, tanto como dioses. Lo cierto es que en La Rioja ya cansa un poco siempre hablando del vino y eso tan cursi del "maridaje" con las setas, las carnes y patatín, patatán. A veces una cerveza fresquita es lo que más apetece y con estas setas va muy bien.
Buen findeeee!!!
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