-->
Antes de ayer, en una de esas tertulias
televisivas, estaban hablando sobre el caso de tres jóvenes que,
tras una pelea en un club de alterne, le quitaron las llaves del
coche a un cliente, lo condujeron sin carnet, se estrellaron y
finalmente quemaron el vehículo. Uno de los tertulianos, indicó que
uno de los jóvenes (hijo adoptivo de un famoso torero retirado)
confesó ante la Guardia Civil su participación en todos los hechos,
excepto en la quema del vehículo, por lo que dicho tertuliano le
preguntó a un abogado, que asistía en calidad de experto, que si
eso podría ser debido a que la quema del coche pudiera constituir el
delito más grave de los cometidos. A lo que el abogado contestó:
“No, realmente, la gravedad de los hechos va a depender
fundamentalmente de si el coche fue devuelto antes de las 48 horas
desde su sustracción, puesto que antes de ese tiempo se trataría
de un “uso indebido sin autorización”, pero una vez
transcurridas 48 horas ya se considera robo”. A lo que el
tertuliano preguntó: “¿Pero aún habiéndo quemado el coche?¿Cómo
lo va a devolver?”. El letrado argumentó: “Bueno, aún estando
quemado, si el coche aparece antes de las 48 horas, el juez podría
interpretar que no ha habido robo”.
¿Por qué todos los letrados de este
país tienen un trato tan exquisito y son tan considerados en sus
interpretaciones de las leyes con los presuntos infractores? ¿Por
qué jamás se equivocan favoreciendo a las víctimas?
Es cierto que nuestras leyes son
tremendamente garantistas y que nuestro Estado de Derecho se basa en
la presunción de inocencia y en el principio “in dubio pro reo”,
pero las dudas deben ser lógicas, razonables y justas, no vale
“curarse tanto en salud” hasta llegar a extremos tan absurdos
como la “duda” planteada por el abogado del primer caso ¡Por
amor de Dios, si existen cualquier tipo de dudas cuando alguien
admite quitarle las llaves a un señor después de una pelea,
conducir su coche sin carnet, estrellarlo y quemarlo, apaga y
vámonos! ¡Así no me extraña que en este país todo el mundo se
vaya “de rositas”! Los del “Prestige”, los de “Noós”,
etc, etc, etc.
¿Por qué los juristas siempre se
posicionan del lado del reo? ¿Por qué se es “más papista que el
papa”? Por favor... ¡Equivóquense alguna vez del lado de las víctimas, que es
humano, y si alguien tiene que recurrir las sentencias, que sea el presunto delincuente quien tenga que molestarse! Porque,...
si no es por eso... ¿Por qué es? ¿Por querer hacer ver a la sociedad
que las leyes tienen errores que deben ser corregidos por el Poder
Legislativo? ¿Por afán de protagonismo quizás? Por favor, si algún
jurista lee estas líneas que me lo explique, porque yo no alcanzo a
entenderlo.
Y encima hoy nos acabamos de enterar que debemos felicitarnos porque PP y PSOE por fin han llegado a un acuerdo
para repartirse el pastel del Consejo General del Poder Judicial, en
un momento en el que es un clamor en la calle que la gente pide la despolitización de
la Justicia y la verdadera separación de poderes, imprescindible para el correcto funcionamiento de la Democracia.
Siempre se ha representado a la
Justicia con una venda en los ojos, pero en este país, además de
ciega, la Justicia es manca y sufre de papanatismo y cobardía
crónicos.
Resuena en el sombrero:
“Tell it to the Judge
on Sunday”.-
The Long Ryders (L.A. (California), 1985).
2 comentarios:
Obviamente, tienes más razón que un santo (asumiendo que eso de ser "santo" sea algo y que, de serlo, implique llevar mucha razón siempre).Y digo yo una cosa, también desde la ignorancia. Si no se le imputa robo, ¿No se le puede imputar "destrozo de la propiedad ajena" o como coño se llame la figura legal?
Muchas gracias Carlos. Por supuesto que al chaval se le van a imputar numerosos cargos, pero el ejemplo concreto es lo de menos, lo que me llama la atención es la forma en que los juristas (incluso uno que no tiene nada que ver con el caso que va a la tele como asesor) se agarran siempre al más mínimo resquicio legal, planteando dudas que rayan en lo absurdo, SIEMPRE para exculpar o rebajar las penas de los presuntos culpables ¿Es que las cárceles están atestatadas? Y que conste que no me gustan las cárceles, es otra hipocresía social, si resulta que no son un castigo sino que es un medio de reinserción, y es evidente que no reinsertan a muchísimos tipos de presos, pues que se quiten y se sustituyan por otra cosa.
Otra posible explicación del sesgo es que los jueces se vean amenazados en su vida privada por el entorno de los presuntos delincuentes para que estos fallen lo más a su favor que puedan, pero me cuesta creer que sea una práctica tan generalizada.
Publicar un comentario